Miércoles 17 de junio del 2009

PREPAREN

La DEA reconoce que en México operan poco más de 300 de sus mejores agentes, independientemente de los que están sujetos al convenio bilateral para filtrar inteligencia o espionaje sobre lo que aquí se ha dado en llamar cárteles, y en los Estado Unidos “gangs”.
Es de prioridad para el gobierno de Washington mantener ocultas las áreas en que se mueven esos elementos de incuestionable perfil hispano-mexicano, lo que incluye no sólo el acento de las diferentes regiones de la República, sino también lo que se conoce como usos y costumbres en todos los órdenes, situación que les permite hasta donde sea posible, pasar inadvertidos. De otra manera es obvio que no solamente corren el riesgo, sino que ya decenas de ellos han muerto en nuestro país.
Coludidos o mezclados en las grandes vendettas y guerra entre los diferentes clanes, cuentan con un sistema de comunicación con los diversos centros donde se dirigen para informar los pormenores y avances que realizan en sus actividades. Y lo mismo ocurre de contra narcos mexicanos que operan en los Estados Unidos.
No es que a los gringos les importe si crece el número de adictos, eso salta a la vista. Lo que les apura es no perder el control de sus grandes divisas. Sus agentes se dispersan en Bolivia, Perú, Colombia, Venezuela, Panamá, Costa Rica, El Salvador, Honduras y Guatemala; y por supuesto en México.
Otra de las tareas de esos hombres, es alertar a su gobierno en torno a quiénes o cuáles autoridades están coludidas con el crimen organizado. Esto pudiera no ser nuevo porque oficialmente el número de efectivos de la DEA y de otras corporaciones gringas, no están autorizadas en número más allá de 40 a 60; el resto son infiltrados o son espías muchos de los cuales sostienen una ambivalencia, es decir, trabajan para allá lo mismo que están metidos lo más profundo con capos mexicanos y latinos en general.
Cabe destacar en esta información, que la nueva mentalidad para el militar mexicano de carrera que comienza en el Colegio Militar, es tener la satisfacción de realizar maniobras de campo, pero autenticas, porque saben que eventualmente pueden enfrentarse a enemigos agazapados.
Son jóvenes en número superior a los 3,000 que no rebasan los 18 años, y entre los cuales destacan 300 mujeres cuyo destino es en esta ocasión es el llamado Triangulo de Oro, la tierra de Joaquín “El Chapo” Guzmán, donde convergen Chihuahua, Durango y Sinaloa.

APUNTEN

La Contraloría General del Estado de Michoacán podría fincar cargos contra Mirella Guzmán Rosas, subsecretaria de Administración de Innovación de Procesos, de la Secretaria de Finanzas y Administración del Gobierno Estatal, por violar la ley estatal de adquisiciones, al favorecer sin adjudicación a una empresa comercializadora de maquinaria y equipo para calzado, el suministro de 400 chalecos blindados para Procuraduría de Justicia en la entidad.
Empresarios de esa entidad, manifestaron a este espacio que esa operación es apadrinada por ella, para apoyar los intereses del empresario Bertolucci, a quien se le ubica en la Secretaría de la Defensa Nacional como vendedor de armas de la marca Cezca de origen checoslovaco.
Por ello ya acudieron a la Subsecretaría de Administración de Innovación de Procesos, para inconformarse con ese procedimiento contrario a la normatividad. Es la empresa Comersa Corp., que tienes su matriz en León, Guanajuato, la que pretende suministrar esos chalecos, pero carece entre otras cosas, del padrón de importadores de la aduana de México.
Los empresarios inconformes, dicen que sus representantes Oldrich Verter, Francisco Miranda Ruteada y Francisco Cárdenas Salazar, no cuentan con el permiso de la Secretaría de Seguridad Pública federal (SSP) para vender chalecos antibalas, eso les impide ofertar este tipo de productos.
Manifestaron que por las características balísticas requeridas por la Procuraduría estatal, la empresa “Giramsa”, es una de las que pudiera suministrar estos bienes.
Sin embargo, con la complicidad de la citada funcionaria, que se ostenta como la operadora financiera del gobernador Leonel Godoy, los socios de Comersa Corp. cambiaron la marca del chaleco First Choice, por otra de origen checoslovaco Petris. Lo delicado del asunto en que está en riesgo la vida de los elementos que porten los chalecos de dudosa confección.

FUEGO

¿A punto de quedar en la impunidad el caso News Divine? Hasta la próxima con más casos En la Mira...