Viernes 30 de octubre del 2009

PREPAREN

Con la condición de someterse a una preparación previa y acreditar una intachable conducta, entrarán en funciones los “caza recompensas”, un proyecto que emanó de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) y que es bien visto por la Procuraduría de Justicia capitalina pues contará con toda la legalidad requerida, y sobre todo porque coadyuvarán a abatir al menos 5,000 órdenes de aprehensión sin cumplir hasta la fecha.
Ese proyecto motivará una mayor participación ciudadana a través del pago de recompensas, que irán desde los 5 a los 100,000 pesos, dependiendo el caso, y con el argumento que la inseguridad en la capital es consecuencia del rezago en el cumplimiento de órdenes de aprehensión desde hace varios años, eso ha dado como resultado que un gran número de delincuentes sigan en las calles, sin que se pueda proceder finalmente contra ellos.
Resulta de suma importancia esta ley que regulará los estímulos económicos y recompensas, para que la sociedad participe con las instituciones del gobierno en materia de seguridad, como vínculo y apoyo para la captura de un presunto infractor de la ley.
En caso de que un fugitivo, o posible infractor de la ley sea menor de edad, deberá ponerse a disposición del Consejo Tutelar de Menores; además se podrá ingresar a un domicilio sin orden judicial cuando se tenga la certeza que el presunto responsable de un delito del fuero común, en su calidad de fugitivo, se encuentra en el lugar.
La limitante para el pago de estímulos y recompensas, señala que no se otorgará a quienes tengan relación con el sujeto pasivo del delito, llámese cónyuge, concubina o concubino y parientes hasta el cuarto grado de consanguinidad.
Tampoco se procedería el pago de recompensas, a quienes ocupen o hayan tenido un empleo, cargo o comisión en materia de seguridad pública, procuración o administración de justicia. Las autoridades competentes para el otorgamiento de estímulos y recompensas, serían el jefe de Gobierno, el procurador de Justicia, y el secretario de Seguridad Pública del Distrito Federal.
Los montos de estímulos que se otorgarían, para el caso de robo a transeúntes o casa habitación serían de 20 salarios mínimos; robo a negocio 30 salarios; robo a vehículo 50; abuso sexual, 70 salarios; delitos contra la salud y privación ilegal de la libertad hasta 100. Las recompensas por la detención de responsables por robo a transeúnte, casa habitación y negocio, serían 200 salarios mínimos; robo a vehículos 500; abuso sexual 500; delitos contra la salud y privación ilegal de la libertad 1,000 salarios mínimos.

APUNTEN

Quienes conviven todos los días con el procurador Miguel Ángel Mancera, dicen que han percibido un cambio en él, luego de lo publicado en este espacio de LA PRENSA respecto a la pérdida de confianza de algunos de sus colaboradores. Ahora el funcionario acuerda directa y en privado con sus homólogos federales, de la Procuraduría General de la República (PGR) y de la Secretaría de Seguridad Pública federal (SSP).
Sabe que hay algunos problemas en la institución, algunos crecen más y más, por ejemplo en lo que se refiere al cumplimiento de las órdenes de aprehensión que emanan del propio búnker, y que en muchos casos antes de ser ejecutadas, son anuladas por una contra orden, lo que provoca un caos en la impartición de justicia.
Caso similares al anterior, desde luego suceden en las fiscalías claves para el trabajo de la procuración de la justicia; de la misma manera, en las 16 delegaciones políticas de las que se derivan agencias coordinadoras que no están dando el resultado que de ellas se espera.
No está lejano el momento en que se conozca algún espectacular asunto mediático desde el búnker, donde se han recibido varias quejas fundamentadas de abiertos desacatos a órdenes de los tribunales federales, incluso son cometidos desde algunas áreas estratégicas de Procuraduría capitalina.
Se sabe que como resultado de las filtraciones se ha permitido la fuga de centenares de “peces gordos” responsables de la comisión de delitos federales, así como del fuero común. Lo ideal sería respetar por completo el sigilo, pero debido a que éste no se respeta, las cosas se dan como las conocemos, es decir, andan libres muchos pillos.

FUEGO

¿Lluvia de amparos en víspera de traslados sorpresa desde el Reno? Hasta la próxima, con más casos En la Mira...

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