Viernes 27 de febrero del 2009

PREPAREN
Más que entusiasmar, preocupa la información emitida por la DEA donde establece que tras 21 meses de investigaciones dentro de la denominada “Operación Xcellerator”, se logró tambalear al cártel de Sinaloa fundado por Joaquín “El Chapo” Guzmán, luego que hasta el momento son ya 751 integrantes de esa organización criminal detenidos, mismos que operaban en 26 ciudades de los Estados Unidos. Claro está, si se considera que en México jamás ha sido posible emprender una operación de esta naturaleza.
Ese trancazo mediático llegó justo en el momento que oficialmente se dio a conocer allá que al Plan Mérida se redujo a 300 millones de dólares, y al tiempo que el Departamento de Estado aseguró que en México la corrupción invade todos los rincones de la administración pública. Esta es la dolorosa realidad que nos exhibe.
Además, ese golpe mediático por demás monumental, no resulta precisamente nuevo, y nada más como anécdota se debe recordar que lo mismo se hizo en su momento con integrantes del clan de los hermanos Arellano Félix, lo cual no significó que hubieran sido liquidados por completo.
La “M” Mafia Mexicana sentó sus reales, por eso hay que recordar que esta letra representa una organización tan temida como efectiva, muy particularmente en el tráfico de drogas. En efecto, a pesar de ese saldo de 751 detenidos, el decomiso de 59 millones de dólares, 149 vehículos, 3 aviones, 3 embarcaciones y 169 armas, nada quiere decir que el tráfico de droga se vea afectado en lo más mínimo.
Cabe aclarar que para que mexicanos muy particularmente los detenidos en esta acción de la DEA hayan sentado sus reales durante un tiempo sin que se les hubiera molestado, sólo tiene un sustento, y es que información de la misma Interpol-México los venía ayudando a través de información privilegiada la que les permitía moverse como “Pedro por su casa…”.
Y todo eso ocurre al tiempo que en el mundo aplaude la valiente acción del Presidente Felipe Calderón en su guerra contra el narcotráfico.
APUNTEN

Una confusión del gobierno de los Estados Unidos en las fotografías de Eduardo Arellano Félix, con las de su fallecido hermano Ramón -quien fue abatido por policías municipales en Mazatlán, Sinaloa, el 10 de febrero de 2002- podría echar abajo su pedido de extradición al vecino país.
El criminólogo Ángel Gutiérrez Chávez se encargó de elaborar un dictamen tras exhaustivo análisis en filiación somática, en el cual se concluye que las fotografías que enviaron desde la Embajada Norteamericana para pedir esa extradición, en realidad no pertenecían a él, sino a su consanguíneo.
Y según el artículo 25 de la Ley de Extradición Internacional, se establece como excepción fundamental que impida la entrega de un extraditable, el que una persona sea distinta a aquella cuya extradición se pide. Eso fue exactamente lo que sucedió.
Ese dictamen fue presentado al juez de la causa por el penalista por Américo Delgado de la Peña, quien atribuye esa confusión a la embajada estadounidense en México, pues las fotos fueron entregadas a las autoridades diplomáticas de nuestro país y a la Procuraduría General de la República (PGR), sin siquiera haber sido revisadas.
“Se le confundió, y se pidió con el nombre de Eduardo Ramón, y en las fotografías anexadas a la solicitud de extradición en una de ellas dice exactamente, “Exhibit Numer One Eduardo Ramón Arellano Félix”.
El también maestro en ciencias penales, dijo que esa documentación provino de la causa norteamericana contra Benjamín Arellano Félix, en la cual el juez 4 de Distrito de Toluca, declaró la no extraditabilidad.
Agregó que además, los cargos de la causa extranjera se están haciendo a una persona identificada por fotografías muy antiguas, que corresponden a su hermano Ramón ya fallecido, por lo que próximamente se pedirá su libertad.
Como se recordará, a finales de octubre del 2008, tras ser detenido Eduardo Arellano, el juzgado 14 de Distrito con sede en Distrito Federal solicitó a un homólogo mexiquense que notificara a Eduardo Arellano Félix la petición formal de extradición. El se encuentra preso en el penal de máxima seguridad de El Altiplano.
“La última palabra la tiene la SER, ya que si concediera la extradición de Eduardo Arellano, violaría a la Ley de Extradición Internacional, y se podrá recurrir a un juicio de amparo”, añadió el penalista.

FUEGO

¿Otra de Rodolfo Félix Cárdenas? Tiró de ‘neófitos’ en la materia del Derecho a los reporteros de la fuente. Hasta la próxima, con más casos En la Mira…

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